La marca independiente MaisonCléo ha presentado su quinta colección, «La Gâtée», en un escenario emblemático de Marsella, con motivo de la primera Slow Fashion Week organizada por el colectivo BAGA en esta ciudad del sur de Francia. Un paréntesis luminoso que combina sensualidad y savoir-faire francés, y que abre la temporada de verano desde una óptica eco-responsable.
MaisonCléo, una marca independiente y comprometida
Fundada por Marie Dewet y su madre en 2017, MaisonCléo hace gala, desde sus inicios, de una visión totalmente independiente de la moda: producción bajo demanda, transparencia en los costes y fabricación artesanal en el norte de Francia. Ajena a los ritmos impuestos por la industria, «la marca no sigue ningún calendario ni tendencia de la moda. No hay colecciones, sino nuevos diseños según la temporada, los deseos y los tejidos». Un enfoque deliberadamente alternativo que no impidió a MaisonCléo participar en la célebre Fashion Week de París, donde presentó su colección bajo la cúpula del Espacio Niemeyer.


Un gusto evidente por la arquitectura que la marca volvió a confirmar en su quinto desfile, que tuvo lugar el lunes 9 de junio. Esta vez, MaisonCléo eligió la costa marsellesa como escenario, y más precisamente la Porte d’Orient, un arco monumental que domina la Corniche Kennedy. Un lugar excepcional que acogió la presentación de su nueva colección dentro de la Slow Fashion Week, un evento organizado por el colectivo BAGA en colaboración con la Ciudad de Marsella, que pone en relieve la moda ecorresponsable en lugares emblemáticos de la ciudad mediterránea.
Una colección muy veraniega
Titulada La Gâtée (una expresión afectuosa típicamente marsellesa), la colección presentada por MaisonCléo en su desfile celebró el espíritu mediterráneo con mucha sensualidad. Mientras un poco más abajo los bañistas disfrutaban de las calas, las modelos desfilaron descalzas sobre el asfalto caliente, como recién salidas del agua, con melodías de fondo que evocaban la calidez de la arena, ¡toda una promesa de descanso y farniente!
En cuanto a los modelos presentados, MaisonCléo se mantuvo fiel a su estilo inigualable: una feminidad suave, sensual y segura de sí misma. Una paleta tricolor (azul-blanco-rojo) con la que la marca celebra su fabricación francesa, al mismo tiempo que afirma su proyección internacional. MaisonCléo se distribuye actualmente en varias tiendas multimarca famosas en el extranjero.



Con sus lunares (pequeños o grandes), estampados florales vintage, cuadros vichy retro, delicados tejidos de crochet y juegos de transparencias, La Gâtée propone un vestuario muy veraniego y soleado. Volantes y cuellos elaborados (desde discretos cuellos Claudine hasta escotes más atrevidos) adornan vestidos cortos y blusas, ideales para pasar de la playa a la ciudad sin necesidad de volver a casa.
Entre las prendas que protagonizaron el desfile se encontraba el vestido de apertura, con un cuello XXL y una combinación de estampados estilo dos en uno; un conjunto denim compuesto por una blusa con amplio escote blanco y un pantalón capri de talle alto con botones blancos; o un vestido trapecio ultrafluido con lunares blancos sobre fondo rojo, que combina la comodidad con una feminidad desbordante. El broche final del espectáculo fue una novia con velo acompañada por Marie Dewet, que lucía un vestido blanco roto estilo lencero, no sabemos si saludando o desfilando ella también.
Un estilo de ropa pensado para todas las feminidades
Si la despedida final de la diseñadora fue un poco ambigua, su compromiso, en cambio, no deja lugar a dudas. MaisonCléo se mantiene fiel a sus valores: materiales procedentes de stocks sobrantes, producción a la demanda (con un plazo de aproximadamente veinte días) y posibilidad de fabricar prendas a medida, incluso para ocasiones especiales como bodas.

Una moda duradera y contemporánea, pensada para todos los cuerpos, todas las feminidades y todas las edades. El lunes, durante el desfile, no hubo una sola gâtée, sino varias. Tantas mujeres como feminidades personales. Una forma para MaisonCléo de cultivar un vínculo fuerte con las mujeres, mientras lanza un guiño a la moda, que sigue siendo poco inclusiva.



Con «La Gâtée», MaisonCléo propone mucho más que un vestuario veraniego: esta colección es una declaración de amor al Mediterráneo, a los cuerpos diversos y a una moda responsable. Con su desfile en la Porte d’Orient, la marca no solo marcó su territorio, sino que además hizo gala de una visión particular de la feminidad, siempre múltiple. Una oda al sol, a los tejidos antiguos y a una nueva moda a contracorriente de la industria, que traza su propio camino.
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Articulo de Julie Boone.